Guía con 7 aspectos indispensables para crear un club de lectura
Actualizado: 6 may 2021
La lectura es una habilidad que no siempre ha estado al alcance de todos. Ahora nos parece natural, y hasta obligatorio, pero no siempre ha sido así. De hecho, fue en verdad accesible para muchos hasta los siglos XVI, XVII o incluso XVIII. Muy pocos países podían presumir de altos grados de alfabetización y que, en consecuencia, sus ciudadanos tuvieran acceso a la habilidad lectora, y con ello al conocimiento y a un tipo específico de entretenimiento.
Una de las características más comunes de la actividad lectora es su carácter individual, en contraposición con otras actividades. Al escuchar la radio o ver un programa de televisión, por ejemplo, esto se puede hacer en conjunto con otras personas, porque no depende del receptor, sino del medio. Lo que se transmite, es igual para todos, a la misma velocidad. En cambio, la hoja escrita, ya sea en papel o digital, aunque sea la misma para todos los posibles lectores, su consumo depende de la habilidad del lector.
La lectura, normalmente, se hace en silencio, ya sea en ámbitos académico, laboral o personal, tanto si es para acceder a nuevos conocimientos como si se trata de lo que se denomina “lectura por placer”. Sin embargo, ¿cómo se socializa lo que se lee?
Una de las condiciones para que se dé la construcción del conocimiento es la interacción y la socialización de lo aprendido con el medio. Esto es, simple y llanamente, compartir lo leído: un proceso de socialización, de construcción de comunidades de aprendizaje.
Este tipo de prácticas no es nueva, alrededor de lo literario. Desde la Antigüedad, una de las primeras formas de entretenimiento consistía en la narración oral de historias. Cabe recordar que historias como la Ilíada tienen origen en la narración oral de los aedos de la Grecia antigua.

A tale from Decameron, de John William Waterhouse, 1916, Lady Lever Art Gallery, Liverpool. Dominio público.
Se puede dar cuenta de diferentes modalidades de interacción a lo largo de los últimos siglos, como las tertulias literarias (una reunión habitual de personas con la intención de conversar). Se cuenta que Frankenstein, de Mary Shelly, surgió a raíz de un reto que Lord Byron lanzó a varios asistentes a una tertulia.
¿Qué es un club de lectura?
En términos prácticos, un club de lectura consiste en una agrupación de personas que, de manera voluntaria, se organizan para leer y comentar la lectura que hicieron de un libro en particular. Como se puede inferir, se trata de una actividad social compleja que convierte una acción individual y privada en una actividad colectiva.
Sin embargo, a pesar de lo que se pueda pensar, un club de lectura requiere de un grado de organización que permita su funcionamiento. Para que pueda llevarse a cabo de manera exitosa, es necesario tener en cuenta los siguientes aspectos para lograr un club exitoso y atractivo: